La preocupación de la gente
son sus necesidades primarias.
La
preocupación de los sectores populares son sus necesidades primarias (alimentos
/ medicinas) el daño terrible de los bandoleros en estos 20 años, nos llevaron
a su terreno, a pensar en lo que ellos quieren que pensemos, a comer lo que
ellos imponen que comamos, bebemos y hasta nos cambiaron de un trancazo la
forma de vivir. Recorrer un sector popular es toparse cara a cara con la realidad
cruda y cruel de lo que ha representado el chavismo / madurismo. Los servicios
públicos en colapso total, la inseguridad hoy es un estilo de dominio social y
poder económico, bajo las sombras nefastas del “Socialismo del siglo XXI.
Bandas armadas, organizadas,
estructuradas y muchas veces financiadas o apadrinadas por algún “Jefe
socialista”. Controlan el negocio de las drogas, del secuestro, de los
alimentos, se habla hasta de la corrupción con la “línea blanca” (nevera,
cocina, TV, lavadora) que maneja el régimen con estos grupos delincuenciales, modelan
la conducta de la “NO PROTESTA” en las comunidades ante cualquier LEGITIMO
reclamo social o comunitario, ese es el pago para que el sistema los deje
operar a sus anchas y con impunidad. A media que avanza la desesperanza de los
ciudadanos en todos los niveles sociales, aumenta el tema de la “intervención
militar”, en la desesperación legítima de la gente por una solución rápida que
evite se sigan dando más muertes por falta de alimentos y medicinas, o seguir
teniendo que despedir a familiares y amigos buscando oportunidades en otras
fronteras.
El
tema de la diáspora dejó de ser hace rato cosa de la poca clase media que el
desastre chavismo / madurismo ha dejado. Visitar cualquier sector popular de
Caracas es encontrar calles y sectores donde las cifras de la diáspora tienen
en alarma y nostalgia a sus vecinos, la semana pasada estuve por San Agustín y
Antímano, conversaba con vecinos de estas zonas sobre sus sectores, como suelo
hacerlo en Catia de donde soy orgullosamente oriundo. Hablábamos de su
cotidianidad, de algunos actos culturales o religiosos propios de cada sector.
Recordábamos ciertas actividades que ya no son tan frecuentes, recuerde que el
sistema nos ha colocado en modo automático, pensar solo en la sobrevivencia
diaria. Caminando algunas calles escuche reiteradamente la siguiente frase: “de
este lado se han ido tantas personas”, hablaban de la diáspora, nos contaban
que no se iban solamente de manera individual ya son familias enteras. Note la
nostalgia y preocupación en cada vecino que recordaba a los amigos y familias
que ya no están. De allí vamos entendiendo la necesidad de la gente por una
solución inmediata que le evita más dolor, sufrimiento y separación.
¡Ojala
fuese fácil! pero nos falta seguir ¡es la verdad! yo honestamente les digo, veo
muy lejana esa “intervención militar”, el tiempo transcurre, y es lo que
intentan los usurpadores, alargar nuestras penas y poder debilitar a Guaidó y a
la Asamblea Nacional (ellos saben de lo lejano de la intervención, también
tienen asesores), los políticos tenemos que ser responsables en la orientación
para los ciudadanos, es su demanda. Aprovecho para traer unas líneas de un
artículo de mi apreciada Thays Peñalver,
(sin anestesia escribió sobre los
invocadores del 187 #11) “Usted es mi lector y no merece de mi otra cosa que
la verdad, al menos lo que pienso sin anestesia. No viene nadie con salidas
rápidas. El 23-F fue como lo escribí en el Miami Herald, un bluf basado en un
absurdo error de cálculo –varias veces cometido-, que además empeoró la
situación, cohesionó a un adversario y Trump luce que no tiene la menor
intención de usar esa última opción con la que muchos sueñan, menos durante las
elecciones y quizás tampoco en su hipotético segundo período. Se lo digo para
que usted se prepare y tome las decisiones basado en hechos y no en quimeras,
que es lo que deberían estar haciendo los políticos, en este momento”.
No
podemos dejar nuestros asuntos solamente en manos de la comunidad
internacional, a quienes les debemos mucha gratitud. Meses pasados Venezuela a
lo interno estaba más activa, eran los gremios, sindicatos, ONG, trabajadores y
ciudadanos juntos reclamando sus problemas y conectándolos, era la pelea de todos, volvamos a esa
lucha de todos y a esa presión de calle legitima en reclamo por calidad de vida
y democracia, pero la verdad es que la gran mayoría siempre ha preferido
soluciones pacificas ¡esa es la verdad! guste o no. Yo sigo apoyando y
aportando a la causa de la recuperación del hilo constitucional y la DEMOCRACIA
del país, Guaidó sigue contando con el 60% de aceptación, logró unificar la
lucha de todos los sectores por la nación, no perdamos este tren por las “vías
rápidas”.
Julio
César Reyes
Secretario General Nacional Adjunto de Nuvipa.
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